Si te preocupas por conocer los ingredientes que contienen los alimentos envasados que compras, seguramente piensas que cuando un producto dice ‘saborizantes naturales’ será bueno para tu familia. Después de todo, ¿qué puede ser mejor que un ingrediente natural? Lamentablemente, los saborizantes naturales pueden contener ingredientes químicos o preservantes y en general podrían haber sido elaborados a partir de cualquier cosa diferente a una fuente animal o vegetal. En este post explico qué se entiende por saborizantes naturales, para que lo pienses mejor cuando vayas a comprar un producto que los contiene.
¿Qué son saborizantes naturales?
De acuerdo con distintas fuentes un saborizante natural es todo aquel cuyo elemento saborizante se deriva de fuentes animales o vegetales, lo que incluye frutas, carne, productos de mar, aves, huevos, lácteos, especias, hierbas, raíces, hojas, etc. que hayan sido destilados, fermentados o manipulados en un laboratorio. Esto los distingue de los saborizantes artificiales, que para obtener un determinado olor o sabor utilizan químicos producidos por el hombre.
En resumen, un ‘saborizante natural’ puede contener prácticamente cualquier cosa. Esto es desconcertante para alguien que le gusta saber qué hay en su comida. Especialmente porque los saborizantes naturales hoy en día son omnipresentes.
Existen más de 2,500 sustancias tipificadas como saborizantes. De acuerdo con EWG (Grupo de trabajo ambiental) ‘saborizante natural’ es el cuarto ingrediente más común en una lista de 80,000 alimentos.
¿Cuál es la diferencia entre saborizantes naturales y artificiales?
Los saborizantes naturales y artificiales no son realmente tan diferentes unos de otros. Ambos tipos se elaboran en un laboratorio, pero mientras que los saborizantes artificiales se elaboran a partir de derivados del petroleo y otras sustancias que no deberías comer, los saborizantes naturales se elaboran, al menos en su origen, de una fuente natural.
Químicamente, los saborizantes naturales y artificiales son iguales y la diferencia está en el proceso por el que han sido obtenidos. Si te parece difícil de entender te pongo el ejemplo de los colorantes. Es posible obtener un colorante amarillo tanto de fuentes naturales como artificiales, pero en ambos casos el resultado será el mismo: un color amarillo.
Algunas veces los compuestos naturales utilizados no se derivan directamente del sabor que se quiere imitar. Un ejemplo de esto es el saborizante de carne que utiliza Mc Donalds en su hamburguesa vegana, que se deriva de la leche y el trigo, entre otras sustancias.
De forma similar, se pueden utilizar violetas africanas para producir el saborizante natural de sandía y toronja para producir el saborizante natural de maracuyá o fruta de la pasión. Por otro lado, para producir el saborizante natural de vainilla o azafrán, se suele utilizar levaduras fermentadas y genéticamente modificadas.
En realidad, muchos de los saborizantes naturales tienen un nivel alto de procesamiento y contienen aditivos químicos. De hecho, un saborizante natural podría contener hasta 100 elementos químicos.
Saborizantes naturales más comunes y sus efectos en la salud
A partir de lo dicho anteriormente, podemos decir que hay muchas cosas que no sabemos sobre el origen de los saborizantes naturales que consumimos. Por otro lado, se llevan a cabo muy pocas pruebas a cargo de laboratorios independientes, sobre sus efectos en la salud.
A continuación doy información sobre algunos saborizantes naturales que son comunes y los riesgos de salud asociados:
Diacetil
El diacetil es bastante conocido como saborizante natural de mantequilla. Lamentablemente, detrás de ese delicioso sabor a mantequilla se esconde un importante riesgo para la salud.
Hay estudios que muestran una asociación entre la exposición a largo plazo al vapor de diacetil, en las fábricas de popcorn de microondas y el desarrollo de la disfunción pulmonar. Estudios con animales han relacionado la toxicidad del diacetil con daño en las vías respiratorias.
Glutamato monosódico (GMS)
El glutamato monosódico es un ingrediente infaltable en la cocina oriental y generalmente cumple la función de mejorador del sabor. Cuando es utilizado en productos envasados, debería ser incluido en la lista de ingredientes. Sin embargo, pueden encontrarse productos relacionados con el glutamato en los saborizantes naturales, pero no necesariamente serán incluídos en las etiquetas.
El consumo de GMS ha sido relacionado con la obesidad y desórdenes metabólicos, con el síndrome de los restaurantes chinos, con efectos neurotóxicos y daño en los órganos reproductivos.
Citral o geranial
Más conocido por su uso como saborizante natural a limón, el citral es un irritante de la piel y de las mucosas. De acuerdo con diversos estudios el citral tiene un efecto fuertemente irritante cuando es inhalado o al contacto con los parches utilizados para diagnosticar hipersensibilidad cutánea. Adicionalmente, el EWG ha manifestado sus preocupaciones con relación a su relación con toxicidad reproductiva.
Castóreo
Este saborizante natural es utilizado principalmente en comidas y bebidas para dar sabor a vainilla y en forma menos común para dar sabor a frambuesa o fresa. Los estudios demuestran que no necesariamente tiene un efecto negativo en la salud cuando se consume en pequeñas cantidades. Sin embargo, hay un hecho desagradable con relación a este saborizante natural. El castóreo es una secreción de las glándulas anales del castor, que el animal usa para acicalar su pelaje y que coincidentemente huele a vainilla.
Saborizantes naturales y alergias alimentarias
Muchos saborizantes pueden ser peligrosos para las personas con alergias alimentarias. Las autoridades alimentarias están comenzando a requerir con más fuerza que las compañías indiquen si sus productos contiene algunos de los principales alérgenos: leche, huevos, trigo, soya, pescado, mariscos, maní o nueces de arbol.
Pero qué pasa si eres alérgico a algo que no está en esa lista. Podría haber sido utilizado en el proceso de elaboración de los saborizantes naturales y el fabricante no está obligado a listarlo.
¿Qué podemos hacer?
La primera línea de defensa para evitar ingredientes peligrosos es fijarse en las etiquetas, de manera que puedas tomar una decisión informada. Pero cuando se trata de ‘saborizantes naturales’ en alimentos envasados, el asunto es más complicado ya que podría tratarse literalmente de cualquier cosa.
Trata dentro de lo posible de evitar cualquier saborizante. En la medida que lo hagas, te sorprenderás con lo bien que se pueden adaptar tus papilas gustativas y lo bien que sabrán los productos naturales que consumas.
La mejor forma de evitar los saborizantes naturales, especialmente si tienes alguna alergia alimentaria, es consumir alimentos en su estado natural. De esa manera no tendrás que preocuparte por los aditivos alimentarios, especialmente aquellos que no son listados en las etiquetas y que podrían acarrear algún riesgo.
Si te interesa el tema de los aditivos alimentarios puedes leer sobre los riesgos del benzoato de sodio, en este mismo blog.
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Me gustaría saber sobre un producto para Tamales
Muchas gracias Jaime por escribir. Me gustaría responder a tu inquietud pero ese tema cae fuera del alcance de este blog. Te recomiendo que contactes a empresas en tu localidad que están en el rubro de producción de saborizantes. He buscado para recomendarte algún nombre que esté en varios países pero no encontré.
Gracias por la información, ahora me iré a leer más artículos como éste. Saludos 😄
Hola disculpe sabran si sabrosano contiene trazas de leche para los alérgicos a la proteína de la leche
Gracias Paola por escribir. Se te refieres al aceite Sabrosano, he revisado la información del producto y entre los ingredientes solamente contiene una combinación de aceites. Aunque no lo especifica, es poco probable que contenga trazas de leche, ya que en las plantas donde se procesan aceites, generalmente no se procesan productos lácteos. En todo caso, si hubiera la posibilidad de que contenga trazas de leche, lo deberían informar en la etiqueta, precisamente para las personas que tienen alergias a los lácteos.
Hola. Deseo conocer los alimentos que ingeriò Hector para su cancer de pròstata
Gracias María por escribir. La forma de alimentarse es muy importante pero no es el único aspecto que hay que trabajar ante un diagnóstico de cáncer. Yo seguí una dieta sin carnes (cualquier tipo) y sin lácteos. Por otro lado sin azúcares refinados y procurando que todos los alimentos sean integrales. El huevo sí estaba incluido en mi dieta. Hoy en día se sabe que una dieta que está compuesta por alimentos integrales y principalmente de origen vegetal es la respuesta para prevenir las enfermedades crónicas que nos aquejan hoy en día, como también para enfrentar un diagnóstico como el de cáncer. De hecho de una manera u otra eso es lo que hacen los habitantes de las zonas azules que alcanzan una gran longevidad. Como una guía, te paso el link del resumen del capítulo correspondiente a la dieta del libro 9 claves de la curación natural del cáncer por Kelly Turner.