Este dip de tomate deshidratado es un gran ejemplo de que se puede comer saludable y a la vez rico. Les comento tres aspectos por los que esta receta es saludable.
- No contiene lácteos, ya que estos tienen sus inconvenientes.
- Contiene grasas saludables provenientes de las nueces. De esa manera se puede tener la misma consistencia cremosa como si se hubiera utilizado queso crema, pero con mejor valor nutricional.
- El tomate es un excelente alimento y en este caso al ser deshidratado, sus propiedades están concentradas.
Espero que te animes a prepararla y que la disfrutes.
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Receta de dip de tomate deshidratado
Delicioso y saludable dip de tomate deshidratado que tiene como base a las pecanas y lleva albahaca para darle aroma. Es apto para veganos y vegetarianos.
- 50 gramos de tomate deshidratado.
- 80 gramos de pecanas. Pueden ser nueces si lo prefieres.
- 1/2 taza de hojas de albahaca. Dependiendo del gusto, esta cantidad puede ser menor o mayor.
- 2 dientes de ajo, picados en trozos
- 1/3 taza de aceite de oliva.
- Sal y pimienta al gusto. Aproximadamente media cucharadita para estas cantidades.
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Remoja los tomates deshidratados en agua caliente por espacio de 10 minutos o hasta que se vea que están suaves. Este tiempo dependerá de la naturaleza de los tomates.
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Lava las hojas de albahaca para eliminar cualquier resto de tierra que pudieran tener. Si no se estás seguro de la procedencia es recomendable que las desinfectes en agua con una solución de las que existen para ese fin. Pica las hojas de albahaca en forma gruesa, para lograr que no queden trozos grandes luego de procesar.
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Cuela los tomates y reserva el agua del remojo porque se puede utilizar para hacer más suelta la preparación. Para ayudar al procesador, puedes picar los tomates en trozos más pequeños.
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Coloca primero los tomates en el procesador y enciéndelo hasta que se haga una pasta. Para ayudar puedes agregar agua del remojo por cucharadas.
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Añade las nueces utilizadas, la albahaca, el ajo, unas 5 cucharadas de aceite y algo de sal en el procesador y enciéndelo nuevamente hasta lograr una mezcla uniforme. No hay problema si las nueces quedan en una consistencia gruesa.
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En caso de no conseguir una consistencia untable, añádele agua del remojo de los tomates y/o aceite de oliva por cucharadas y vuelve a procesar. Repite la operación hasta conseguir la consistencia deseada.
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Prueba la sazón, rectifica en caso de ser necesario y procesa nuevamente.
- Se puede servir con las tostadas de tu preferencia o con galletas.
- Esta receta se puede preparar también con almendras, castañas o con la nuez que sea de tu preferencia. En el caso de las almendras es aconsejable remojarlas por un par de horas para que sea más fácil procesarlas.
- Es preferible no usar el ajo crudo porque puede dar un sabor muy fuerte a la preparación. El ajo asado es una alternativa pero no es tan simple obtenerlo, lo que yo hago es poner los dientes de ajo en una sartén a temperatura media, removiéndolos de vez en cuando para evitar que se quemen, por unos 10 minutos. De esta manera obtendrás un efecto similar que el ajo asado, pero de una manera más fácil.
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