Esta receta es una variación del ají de gallina, plato muy popular de la gastronomía peruana, que lleva trozos de pechuga de pollo deshilachada en una salsa a base de ají amarillo y utiliza pan remojado en leche para darle una consistencia cremosa. En este post presento la receta del ají de alcachofa y quinua o quinoa, en el que he reemplazado el pollo por corazones de alcachofa y el pan por quinua hervida.
El resultado de esta receta no pretende obviamente reemplazar al plato original. Sin embargo es una receta interesante, que es apta para veganos y vegetarianos.
Esta alternativa de comida vegetariana peruana, permite incorporar más vegetales en tu dieta y además, al reemplazar el pan remojado en leche por quinua, se incorpora el tremendo valor nutricional de ese alimento.
Versiones saludables de otras recetas peruanas
Receta de ají de alcachofa y quinua
Este ají de alcachofa y quinua es una versión vegetariana del ají de gallina peruano. Lleva alcachofa en lugar de pollo y también quinua.
- 6 a 8 corazones de alcachofa, cortados en láminas a lo largo, lo más delgadas que puedas. Si no consigues corazones de alcachofa del mismo tipo que yo he utilizado, puedes usar los corazones que consigues en conserva.
- 2 cucharadas de aceite para freír.
- ½ cebolla, picada, no tiene que ser muy finita porque se va a procesar.
- 2 dientes de ajo picado finito o cucharaditas de ajo molido.
- 3 a 4 cucharadas de ají amarillo en pasta o una cucharadita de cúrcuma en polvo, si prefieres no utilizar ají.
- 3 cucharadas de quinua cruda o dos tazas de quinua cocida.
- 50 gramos de pecanas o nueces, picadas en trozos pequeños.
- 2 cucharadas de queso parmesano rallado. Opcional. Si no deseas utilizar lácteos, puedes utilizar una cucharada de levadura nutricional o simplemente prescindir de este ingrediente.
- 1 taza de leche vegetal. Opcional. Si no tienes restricción para consumir lácteos puedes usar leche de vaca. Este ingrediente le aporta cremosidad a la preparación, pero no es necesario, puedes reemplazarlo por caldo de verduras.
- 2 tazas de caldo de verduras y/o el agua de la cocción de la quinua.
- 2 papas amarillas, cocidas y cortadas en rodajas. La papa amarilla es muy común en el Perú y es apreciada por su textura arenosa para este tipo de platos o para acompañar salsas en general pero no se consigue en todas partes. Si no la encuentras puedes usar una papa que sea arenosa o simplemente la que encuentres.
- 2 huevos duros. Opcional. Cortados en rodajas o en gajos a lo largo.
- Aceitunas negras, una a dos por cada persona.
- sal y pimienta al gusto.
- Gotas de limón, para cocinar la alcachofa.
-
Para cocinar la quinua debes previamente lavarla bien. A menos que el proveedor indique en el empaque que está libre de saponina (compuesto que posee la quinua y que da un sabor amargo), debes lavarla frotándola con las manos, cambiando el agua varias veces, hasta que ya no salga espuma.
-
Pon a cocinar la quinua en una olla con 3 a 4 veces el volumen de agua, una vez que comience a hervir baja el fuego a medio y déjala por unos 20 minutos. Verifica antes de ese tiempo que no se haya consumido el agua. Si prefieres un mejor sabor puedes poner a cocinarla en caldo de verduras. Cuando esté lista la cuelas y dejas enfriar, reservando el agua o caldo residual.
-
En una sartén u olla caliente, agrega el aceite y añade la cebolla, el ajo y la pasta de ají amarillo. Si no estás utilizando ají, añade la cúrcuma en este momento para que se integre. Sazona con sal y pimienta al gusto y continua removiendo de vez en cuando para que no se queme, hasta que la cebolla esté transparente. Si vez que se seca, puedes añadirle algo de caldo.
-
Incorpora la quinua y deja que se integren los sabores.
-
Retira del fuego y deja que enfríe un poco para que sea más fácil de trabajar.
-
Coloca el contenido de la olla o sartén en el vaso de la licuadora y enciéndela hasta lograr una consistencia cremosa. En caso sea necesario, añádele leche o caldo, de a pocos, cuidando de que no quede muy aguada.
-
Regresa la mezcla a la olla y añade las alcachofas, las pecanas y el queso parmesano o levadura nutricional, mezcla y déjala a fuego bajo, para que se integren los sabores y hasta que las alcachofas estén cocidas. Las alcachofas necesitarán unos 4 minutos para estar al dente, porque están cortadas en trozos pequeños.
-
Dependiendo de la consistencia puedes añadir más leche o caldo, verifica la sazón y corrige en caso de ser necesario.
-
Sirve con las papas, los huevos y las aceitunas.
- Puedes acompañarlo con arroz o con pan, de acuerdo con tu gusto.
- Si no consigues la pasta de ají amarillo, utiliza 4 ajíes verdes (son los de color amarillo). Los abres por la mitad y le quitas las semillas y las venas y los pones a hervir en agua por 5 minutos y repites la operación cambiando de agua unas 3 a 4 veces, para reducir el nivel de picante.
- Si no consigues ají amarillo, pero quieres que tenga un poco de picante, puedes añadir el ají o chile de tu preferencia al momento de freír la cebolla.
¿Quieres más contenido como este? ¡Suscríbete!
Suscríbete y podrás descargar gratis mi ebook sobre el caso de sanación de leucemia con métodos naturales de Glenn Sabin.
¡Perfecto! Para asegurar que tus datos están correctos, sigue el link del email enviado a tu bandeja de entrada.
Algo salió mal
Anónimo says
excelente plato !
paz ccoricasa ruth says
muy buena las recetas para nuestra salud.
Anónimo says
me gusto el plato
Anónimo says
no es vegano si lleva huevo y queso
Héctor Talavera says
Si revisas el detalle de la receta, podrás ver que da las opciones de ingredientes tanto para hacer una preparación vegana como una vegetariana.