Esta pasta de berenjena asada con cebolla es una buena forma de incorporar
más vegetales en la dieta, particularmente la berenjena.
- 500 gramos de berenjena. Será una berenjena grande o 2 pequeñas.
- 1 diente de ajo molido o cucharadita de ajo molido.
- 1 cebolla, cortada en cuadraditos pequeños.
- 1 taza de salsa de tomate. Yo la prefiero a la pasta de tomate. Si usas pasta de tomate considera la mitad aproximádamente, ya que es más concentrada.
- 1/4 cucharadita de hierbas aromáticas secas, las de tu preferencia. Una buena alternativa es la mezcla de finas hierbas.
- Sal al gusto.
- 2 cucharadas de aceite para freír.
- ½ taza de aceite de oliva. Aproximádamente.
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Lava las berenjenas y hazles agujeros en toda su superficie con la ayuda de un tenedor, para ayudar a que pierda agua. Colócalas en una fuente que pueda ir al horno. Si lo prefieres puedes cubrirlas con papel aluminio, pero no es necesario.
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Coloca la bandeja en el horno, previamente calentado a una temperatura de 160 °. Las berenjenas necesitarán unos 20 minutos, dependiendo del tamaño y del horno. La primera vez revísalas de cuando en cuando, para evitar que se quemen. Debes darles la vuelta a mitad del proceso, para que se cocinen uniformemente. Para averiguar si están listas puedes usar una pinza o una cuchara para presionarlas y lo sabrás cuando estén suaves.
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Cuando estén cocidas, retíralas del horno y déjalas enfriar.
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Cuando estén a una temperatura que se puedan trabajar, ábrelas por la mitad, retira la comida con la ayuda de una cuchara, córtala en trozos pequeños y resérvala.
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En una sartén caliente coloca 2 cucharadas de aceite, la cebolla y el ajo. Revuelve para evitar que se quemen. Cuando se hayan calentado, baja un poco el fuego, de manera que puedan asarse suavemente. La cebolla estará lista en unos 2 a 3 minutos. Puedes agregar un poco de sal y pimienta.
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Cuando la cebolla esté lista, añade a la sartén la berenjena y las hierbas que estés utilizando, revuelve para que se integren. Añade la salsa de tomate y mezcla.
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Para terminar, añade ¼ de taza de aceite de oliva y mezcla nuevamente. Sazona con sal y pimienta.
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Prueba la sazón y corrige en caso de ser necesario. Igual, de acuerdo con tu gusto puedes agregarle más aceite de oliva, nunca estará de más.
Esta receta va muy bien con pan pita tostado o sin tostar, con pan campesino tostado, con galletas o lo que más te guste.