Hamburguesa de falafel al horno, variación de la receta tradicional, en forma de hamburguesa, apta para ponerla entre panes.
- 250 gramos de garbanzos crudos. Remojados durante la noche. Si prefieres puedes usar garbanzos de lata, pero en ese caso tendrás que ajustar el peso como al doble.
- ½ cebolla. Picada en trozos grandes.
- 2 dientes de ajo, picados en trozos, no importa el tamaño.
- ½ taza de hojas de perejil fresco. No tienen que estar picadas.
- ¼ taza de hojas de cilantro fresco. Igualmente sin picar.
- 1/8 cucharadita de comino molido. Si te gusta puedes ponerle un poco más.
- 2 cucharaditas de bicarbonato de soda.
- 2 cucharadas de harina sin preparar.
- 2 cucharadas de aceite de oliva.
- ½ cucharadita de páprika, si es picante mejor.
- 1/8 cucharadita de cardamomo en polvo (opcional).
- Sal y pimienta al gusto.
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Para preparar el falafel necesitarás un procesador y una placa de horno con capacidad suficiente para contener todas las croquetas. Si no la tuvieras puedes hornear en dos tandas.
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Escurre el agua del remojo de los garbanzos o de la lata y deja que drenen bien.
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Coloca los garbanzos en el procesador junto con los demás ingredientes y tritúralos hasta conseguir una textura similar a la de la arena. Deben quedar bien picados pero si queda algún trozo de garbanzo no pasa nada. Si está muy seca la masa, puedes añadirle un poquito de agua en cucharadas, para evitar excederte ya que la masa debe quedar firme.
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Dependiendo de la capacidad de tu procesador, tal vez tengas que repetir el proceso del paso anterior más de una vez hasta que esté procesado todo el garbanzo. De ser necesario detén el procesador y con la ayuda de una espátula remueve lo que haya quedado en las paredes para que quede todo bien incorporado.
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Coloca la mezcla de los garbanzos triturados en un tazón, mezcla para que se integren bien los ingredientes.
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Prueba la sazón y rectifica en caso de ser necesario.
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Deja que repose la mezcla por una media hora, tapada con un paño, para dejar actuar al bicarbonato y que queden más esponjosas.
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Revisa la consistencia de la masa y en caso de que haya quedado húmeda puedes utilizar harina para darle consistencia y facilitar el trabajo. Dale la forma a las croquetas del tamaño que sea de tu preferencia y las pones en la placa de horno. Si lo prefieres las puedes freír, de acuerdo a como acostumbras con las hamburguesas.
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Con estas cantidades de los ingredientes quedarán unas 15 croquetas si no son grandes. Puedes congelarlas en crudo o también luego de hornearlas. Particularmente prefiero congelarlas ya cocidas ya que así no tengo que prender el horno cuando quiera comerlas.
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El tiempo de horneado a una temperatura de 180° C es aproximadamente 20 a 30 minutos. Deja que horneen primero unos 20 minutos, dando tiempo para que haga costra en la parte de abajo y así sea más fácil voltearlas. El tiempo dependerá de tu horno, por lo que deberás revisarlas seguido la primera vez. Cuando veas que comienzan a dorar por encima, es un indicativo de que puedes darles la vuelta.
- Hay que buscar que la mezcla sea bien seca para evitar que los falafel se deformen mientras están en el horno o al momento de freír.
- Si cuentas con una freidora de aire, puedes prepararlas ahí también. Es un procedimiento más práctico que el horneado, ya que se hacen más rápido e incluso no tienes que darles la vuelta. El tiempo dependerá de las características del aparato que tengas. En mi caso con 13 minutos a 180° es suficiente para que estén listas, si es que son pequeñas, como de 5 centímetros de diámetro.